
Miami Beach es un centro gastronómico y hotelero, y Sandy Sánchez es un ingrediente clave en nuestro paladar. Nacida en Hialeah, de padres cubanos, Maribella y Rafael Sánchez, el paladar de Sandy siempre ha estado impregnado e influenciado por especias, técnicas y sabores españoles, africanos y caribeños. La trayectoria de Sandy comenzó en la década de 1950, cuando su tío, Frades Sánchez, emigró a Estados Unidos para jugar con los Yankees de Nueva York. Tras una lesión que puso fin a su carrera, Frades se mudó a Miami, y sus padres, que huyeron de Cuba en 1960, se unieron a él y se establecieron en Hialeah. Maribella y Rafael, como muchos inmigrantes cubanos, consiguieron empleos en fábricas. Sandy recuerda vivir en Hialeah, frente a la fábrica donde trabajaba su padre, y los dulces aromas de su madre cocinando en la cocina. La Sra. Sánchez, una de las primeras emprendedoras, comenzó a preparar almuerzos para los trabajadores de la fábrica, y Sandy recuerda con cariño cómo su hogar se convirtió en un lugar especial para que trabajadores, vecinos y personas necesitadas vinieran a disfrutar de auténtica comida cubana casera.
“Mi mamá me inspiró. Tenía un espíritu emprendedor y compartió su pasión por la cocina con nuestra comunidad”, afirma Sandy. “La cocina de mi mamá se convirtió en un lugar acogedor para reunirse, compartir, amar, reír y disfrutar de la mejor comida del barrio”.
Aunque Sandy se mudó a Los Ángeles para dedicarse a la actuación, el encuentro con el amor de su vida, su esposo, el chef Benoit "Ben" Rablat, es su recuerdo más entrañable de su breve estancia en California. Se conocieron en el barrio de Silverlake, y allí aprendieron los placeres de la buena comida y el vino, y se enamoraron de organizar cenas para nuestros amigos. También fue allí donde se plantó la semilla de lo que sería un restaurante.
El primer restaurante de Sandy y Ben, La Fresa Francesa, un restaurante francés muy popular en Hialeah, es un íntimo bistró francés con un ambiente bohemio. Tras siete años de éxito como restauradores, estos emprendedores gastronómicos buscaron expandirse a Miami Beach... y así nació Silverlake, una celebración amorosa de su amor mutuo y de la comida, en North Beach.
La apertura de Silverlake fue un punto de inflexión para nosotros y para North Beach. Presentamos un nuevo restaurante de moda con una estética de barrio cálida y refrescante, y North Beach se incorporó a un bistró familiar y accesible a pie. La combinación de la deliciosa comida de Ben y el estilo y la personalidad de Sandy convirtió a Silverlake en un destino gastronómico de primer nivel. Afirma David Sexton, presidente de la Asociación de Negocios de la Fuente de Normandía.
Sandy ha puesto toda su alma en cada detalle de Silverlake, desde la música, el papel pintado artístico, los adornos divertidos y la cálida bienvenida a cada cliente. "Queremos que el lugar sea lo más sencillo posible. Quiero que se sienta como si estuvieras comiendo en casa de mi madre o en casa de tu abuela", dijo Sandy. "No hay recetas mágicas, solo la combinación perfecta de especias, amor, calidez, cultura y trabajo duro".
Entre los favoritos se encuentran la receta francesa original de la madre de Ben: mejillones con queso azul, vino blanco, chalotes y cebolletas, y la hamburguesa Silverlake, una doble hamburguesa con queso cheddar, tocino, salsa para bistec y alioli. Silverlake Bistro abre para cenar de miércoles a domingo y brunch los domingos. Para más información, puedes encontrarlos en Facebook: https://www.facebook.com/silverlakemiamibeach/¡Feliz Mes Nacional de la Herencia Hispana!